¿Cuánto cuesta una página web?
No hace mucho, hablando con mi amigo Jorge Álvarez, le pregunté en broma que presupuesto mínimo debería tener la página web ideal, me respondió «¿Qué presupuesto mínimo debería tener el coche ideal?». Voy a utilizar esta analogía para intentar explicar de una forma llana los mínimos de los que hablamos para realizar un presupuesto web.
Quién no ha tenido el típico cliente que le pregunta, ¿Cuanto cuesta hacer una web?. Imagínate entrando en un concesionario preguntando cuanto cuesta un coche. El comercial te respondería que depende de la marca, la cilindrada, los extras… Cada cliente tiene sus necesidades y objetivos y debemos adecuarnos a ellos para realizar una estimación y lo que está claro es que en internet el presupuesto cerrado no existe. Según avance el proyecto puedes querer añadir funcionalidades que al principio no se habían contemplado, el proyecto puede y debe evolucionar.
Vale, ya tenemos nuestro flamante coche con extras a medida y un color metalizado que nos diferencia del resto de los mortales, ahora queremos salir a dar una vuelta y que todo el mundo vea el pedazo coche que tenemos, pero para que ande primero le tendremos que poner gasolina ¿no?. La gasolina en las web es el SEO y el SEM, que harán que nuestra web sea vista. De nada sirve tener un gran coche si lo vamos a dejar en el garaje y solo se lo vamos a enseñar a algunos conocidos. La promoción y la optimización de los términos de búsqueda que conviertan las visitas genéricas en visitas de calidad es vital, ya que se transforma en beneficios, porque una web debe estar hecha para ganar dinero.
Y un día te das cuenta de que el coche te hace un ruido extraño, que no va igual de bien que cuando te lo compraste. Lo lógico sería llevarlo al taller a que le solucionen el problema. Con nuestra web debemos hacer lo mismo, gracias a la analítica web podemos determinar el comportamiento de nuestros usuarios dentro de la web, por que páginas entran y por cuales salen, en qué fase del carrito de la compra abandonaron la transacción, etcétera. Podemos hacer test con diversos diseños de páginas y ver cuál funciona mejor. Datos que harán que podamos saber como mejorar nuestra web para obtener más beneficios.
En definitiva, no es lo mismo un 600 que un formula 1 y los dos son coches. Lo mejor es ponerse en manos de profesionales y ser lo más sincero posible, muchas veces diciendo la inversión que puedes realizar en una web se pueden optimizar los recursos en función de tus posibilidades y necesidades.
Otro día podemos hablar de la chapa y pintura y del motor de nuestro coche, pero a grandes rasgos esto nos demuestra que una pregunta inocente tiene muchos matices.
Etiquetas: analítica, Diseño Web